La trufa blanca de Istria-Croacia

Elixir afrodisíaco, hijo de los Dioses, milagro de la naturaleza, según Cicerón, Y otros muchos epítetos, devociones y admiración que el tubérculo “tuber magnatum pico… ” ha provocado a lo largos de su centenaria historia. Katerina de Medicí la introdujo en Italia y los Borbones, desde Luis XIII hasta Luis XV la propusieron en las mesas más elitistas. Su potente aroma a humedad, a tierra, a gas metano, registro de vegetales crudos, incluso a mentolado , emana una sensualidad que se materializa al degustar el delicado bocado que con sabores un poco dulces, un poco picantes, un tanto aromáticos y hasta especiados , causan adicción. Casanova tomaba ragout con trufa blanca antes de sus citas clandestina y es reconocido que una comida a base del tubérculo y regada con un buen vino ablanda al más arduo de los espíritus. Una península privilegiada. Pocos lugares en el mundo cuentan con la dicha de albergar trufa blanca en sus bosques. A diferencia de la negra, la blanca no depende de la intervención del hombre y su vida es efímera, solo se encuentra de Octubre a Enero y se mantiene fresca poco tiempo, lo que la hace aún más cotizada en el mercado internacional. Uno de los lugares elegidos es la península de Istria que reúne las condiciones idóneas para su crecimiento. Istria está situada en el adriático, entre los golfos de Trieste y Rijeka y no le falta de nada. Su mar es transparente y está serpenteado por atractivos pueblos marineros. Su…Read More