Stefan Jacek ha rescatado el legendario Faro de Gdansk, fiel testigo de la historia polaca, y ha restaurado su esfera del tiempo que ayudó a precisar la cronología marina anterior a Marconi.

Cómo medir el tiempo en el mar? Qué pregunta tan simple para la tecnología del siglo veintiuno. Antaño no lo era. Muchas vidas se perdieron por la falta de cronología marina, y muchos erraron su destino, llegando incluso a creer que habían llegado a él. John Harrison, nacido en el s. XVII en el Condado de York, solucionó gran parte del problema inventando el cronómetro. Hijo de un carpintero y muy aficionado desde niño a cualquier maquinaria que tuviera ruedas, especialmente relojes, ganó la suma de 20.000 libras, premio concedido por su majestad a quien lograra determinar la longitud de un grado con un error de 30 millas.

El sueño de un hombre

Si los faros marinos entrañan romanticismo y leyenda, aquellos a los que les coronaba la Esfera del Tiempo multiplicaban su aureola de misterio. El faro de Gdansk es uno de los más bellos del Báltico. Con una altura de unos 27 m. y una estructura gemela al faro de Cleveland, Ohio, está situado en una orilla del Puerto Nuevo de Gdansk y ha vuelto a renacer de sus ruinas cuando un soñador llegó un buen día y le sacó del olvido. Su nombre es Stefan Jacek Michalak, nacido en Varsovia en el 1943. Estudiante de electrónica en la Politécnica de Gdansk en 1966 viajó a Alemania, donde trabajó en grandes compañías en la rama de telecomunicaciones y en barcos de la Marina Comercial Alemana.En 1969 sé trasladó a Canadá donde ha establecido su domicilio, cerca de Québec, allá donde el gran San Lorenzo desemboca en el Atlántico y su desembocadura está salpicada por faros de indescriptible belleza. Durante estos años Stefan, viajero incansable, ha residido en Arabia Saudita donde escribió el libro “Rub al Chali” publicado en Varsovia en 1999, ha viajado desde el Labrador hasta las pirámides mayas y la Guayana Francesa, ha ejercido como escultor; algunas de sus esculturas sirvieron para ilustrar un libro de poesía del poeta Ryszard Horodecki publicado en Gdansk en 2003 y finalmente, ha cumplido su sueño y en 2001 compró al Estado Polaco el faro de Gdansk. Tras años de restauración en los que le devolvió su esplendor añejo, en 2004 abrió sus puertas al público para compartir el museo que había instalado en su interior, dedicado a los faros, y finalmente en 2008 recompuso la esfera que corona orgullosa la cima del faro de Gdansk ; a las 11,55 se alza hasta el pico, rodeada de admiradores que esperan ver caer la bola dando el punto de las 12. La esfera está hueca para evitar las batidas del viento, tiene 1,50 m.de diámetro y pesa 70 Kg, cuenta Stefan sin perder su entusiasmo primario y amenizando la narración con leyendas, anécdotas y hechos históricos que rodean la estela del faro del Nuevo Puerto.

Su rayo de luz cadencioso e inmutable ha alumbrado hechos en los que hubiera deseado estar ciego y acontecimientos grandiosos por los que la Ciudad Libre de Gdansk ha pasado a lo largo de su controvertida historia. Su enclave estratégico en la desembocadura del Vístula le hizo ser la puerta marítima de Polonia durante siglos, cobró un triste protagonismo aquel 1 de Septiembre , comienzo de la segunda guerra mundial y fue el escenario donde se gestó y maduró el movimiento de Solidaridad.

Esfera del Tiempo:
Stefan Jacek Michalak
Puerto Nuevo de Gdansk
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Información:
Oficina Nacional de Turismo de Polonia
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